Las trituradoras de cono operan según el principio de trituración por compresión. Resultan óptimas aplicadas en la trituración de rocas duras y abrasivas. En estos casos los ratios de productividad son altos porque, aunque los costes de desgaste son elevados, las paradas por mantenimiento son menos frecuentes que en sistemas de trituración por percusión gracias a la mayor duración de los fungibles.
Proporcionan una buena calidad del producto, especialmente balasto, bases y gravillas.
Están provistas de un manto excéntrico y uno cóncavo; entre ambos elementos pasa la roca a triturar, realizando el manto la tarea de compresión. Se utilizan en etapas secundarias y terciarias. Se puede optar por diferentes configuraciones de la cámara dependiendo del tamaño de alimentación y del requerimiento granulométrico deseado para el producto final. No son los equipos más adecuados para producción de arenas por la escasa cubicidad del producto resultante.
Aplicación en instalaciones fijas y en equipos móviles.